Rokis

viernes, julio 15, 2005

A la misma hora, en el mismo lugar....

A la misma hora en el mismo lugar, el iba cada tarde para verla pasar, ella abrazada con el hombre aquel, y él enamorado de esa mujer... a la misma hora en el mismo lugar, en la misma mesa y en el mismo bar, dejaba el corazón llorando por amor, por ese amor que le quitaba el sueño, la vida y la paz... y luego por la noche él volvía a casa, un beso, una caricia de quien lo esperaba, siempre el mismo reproche, su mirada ausente, siempre la imagen de ella, dueña de su mente... y luego otra vez, despierto en la cama, tratando de olvidarla, abrazado a su almohada, de nuevo esa pregunta: "dime qué te pasa'" y él que le responde: "nada, hasta mañana..." a la misma hora en el mismo lugar, el volvió esa tarde para verla pasar, ella como siempre con el hombre aquel, y él que se moría por esa mujer... a la misma hora en el mismo lugar, en la misma mesa y en el mismo bar, al final le escribió una carta de amor, con lo que hubiera querido decirle y no se atrevió... y luego por la noche él volvía a casa, un beso, una caricia de quien lo esperaba, siempre el mismo reproche, su mirada ausente, siempre la imagen de ella dueña de su mente... y esa noche en silencio se fue de la cama, guardó en una maleta lo que le quedaba, le puso a su mujer la carta en la almohada, a ese amor infiel, a la que tanto amaba... y se fue despacio para no volver, se marchó en la noche del domingo aquel, pero cada tanto lo veían pasar, a la misma hora y en el mismo lugar...